Foucault había pensado que sus útiles se destinaban a ser empleados para cuestionar los sistemas de poder, no para reforzarlos.
Francisco Vazquez García
INTRO
Este fin de año cierro un ciclo en la Escuela de Teatro, que empezó en marzo de 2017, cuando fui invitado por Coral Aguirre para hacerme cargo de la materia de Dramaturgia, entonces llamada Psicología del drama, que se imparte en tercero y cuarto semestre. Tiempo después me haría cargo también de las materias de Historia del teatro y el Taller de lecturas.
Han sido casi nueve años de ver pasar por las aulas a personas entrañables y talentosas. Algunos continuaron sus estudios y otros se abrieron camino en el campo profesional; muchos regresaron a sus lugares de origen, otros a su vida laboral y algunos más siguen su proceso dentro de la escuela. Pero me quedo con la certeza de que haber pasado por la escuela de teatro o estar ahí, ha marcado su vida de alguna manera, así como ha marcado la mía.
Mi decisión es completamente voluntaria y se debe principalmente a que la Escuela de Teatro ha dejado de ser un lugar en el cual perciba que mi trabajo es valorado y también porque mis aportaciones ocupan un lugar secundario ante las negligencias administrativas y académicas que he padecido los últimos años.
ARTES VIVAS O VIVA LA VOLUNTAD DE PODER
A su llegada a la coordinación de la escuela de teatro, hace dos años, para ocupar el puesto que dejaba Coral Aguirre, Javier Serna anunció que la escuela dejaría de ser una “tradicional” escuela de teatro, para convertirse en una nueva escuela de artes vivas, lo que implicaba una revisión de toda la malla curricular para adaptarla al nuevo enfoque educativo y también la entrada en una dinámica de transición. Propuso tres ejes de trabajo: las artes vivas, la antropología visual y las prácticas performáticas.
Este cambio de programa no sería inmediato, sino que entraría en vigor hasta dentro de seis meses. En ese momento lo más urgente era realizar un montaje con motivo de los festejos por los 50 años de la escuela, producción en la cual los alumnos y maestros podrían colaborar.
En esa primera reunión y después de que hube explicado el contenido de mi materia, el coordinador me dejó claro que no quería que la dramaturgia formara parte de la nueva malla curricular, ya que él consideraba que los alumnos no estaban capacitados para afrontar la escritura de sus propios textos. Consideración hecha a destajo y sin presentar ningún sustento.
En un primer momento quise interpretar ese rechazo como el rechazo a un “tipo” de dramaturgia, así que posteriormente que me acerqué al coordinador con algunos libros: el teatro posdramático y repensar la dramaturgia, para plantearle que proponer un nuevo enfoque en la dramaturgia sería mejor que quitar la materia, pero pareció no darle demasiada importancia.
Para dejarlo más claro se tomó la libertad de cambiar el nombre a mi materia, por el de Psicología Aplicada a las Artes Escénicas; y lo hizo sin consultar conmigo, sin la autorización de un cuerpo colegiado y sin la revisión de los contenidos de esa nueva materia que hasta entonces no existía.
Meses después, su primera actividad pública como coordinador de la escuela de teatro fue el estreno, bajo su dirección, de la obra GuiYerma, una adaptación hecha por su propio hijo, de un clásico de García Lorca, presentada en el marco del 34° Encuentro Estatal de Teatro Nuevo León y anunciada como una producción de la Compañía Universiteatro.y por supuesto hecha con recursos de la escuela: sobre todo recursos humanos: maestros y alumnos elegidos por él.
Mencionaré de paso que internamente este período de transición no ha sido fácil. La vida estudiantil ha sido trastocada. Actividades consideradas habituales cada semestre como las clases abiertas al público, o eventos regulares que tenían lugar cada año como los festejos por el día del libro, el día de muertos y el día de la mujer, por mencionar algunos, desaparecieron sin consulta alguna. Eran eventos que hacían de puente y conexión con la sociedad: los padres de familia, los amigos de los alumnos y los espectadores asiduos al teatro. En su lugar quedaron kermeses esporádicas para recaudar fondos que se usan en las mismas obras de Serna o para producir los exámenes finales, que cada vez son menos.
Este año que termina el cambio hacia las Artes Vivas sigue esperando, pero no los estrenos del coordinador, que este año estrenó Tempestades, adaptación de la conocida obra de Shakespeare dirigida por él y en la que también actúa.
Todo esto mientras la escuela está descuidada. Los salones están mal iluminados y no son suficientes, falta acondicionamiento para las clases teóricas y prácticas, el área de danza no tiene duela y eso pone en riesgo la integridad física de los alumnos; si llueve la escuela se inunda; sólo hay un proyector y el internet no tiene cobertura en todas las áreas, etc.
Las condiciones de posibilidad son pobres y las promesas muchas. Mientras el cacareado cambio radical y la revolución académica se esfuman en prácticas anquilosadas que sólo recuerdan al viejo autoritarismo colonial.
LA EXPERIENCIA DRAMATÚRGICA
Cuando llegué a la escuela de teatro la materia se llamaba Psicología del drama, un nombre heredado de una malla curricular cuyos contenidos habían sido elaborados por maestros anteriores, pero cuyo material efectivo era de dramaturgia, entendida como creación dramática y análisis de textos.
Con estos antecedentes revisé y actualicé los contenidos de la materia, que siempre fueron teórico-prácticos, pero no siempre los mismos y no siempre siguiendo los mismos objetivos ya que la materia, su objeto de estudio y por lo tanto su práctica, requiere ser actualizada y re-elaborada cada cierto tiempo.
No concibo el teatro sin dramaturgia porque entiendo a la dramaturgia como una práctica fundante de lo teatral e irremplazable para la construcción del tejido significante del espectáculo, es decir, para la construcción del discurso y el sentido.
Claro que el sentido puede reventar en la interpretación del espectador. Y sí, que estalle en mil pedazos al momento de colisionar con el otro. Eso no quita la responsabilidad del trabajo dramatúrgico: encauzar el sentido de la obra para “hacer algo” con el público, o “hacerle algo” al público. Para lograr eso la obra debe estar estructurada de determinada manera y no de otra. Esa “determinada manera” es el trabajo de la dramaturgia.
El arte de la dramaturgia no radica sólo en decir cosas persuasivas (retórica), ni decirlas de cierta manera (poética), sino sobre todo en hacer cosas que funcionen: máquinas, dispositivos, artefactos que enuncian y hacen cosas.
Negarle a los alumnos la formación dramatúrgica es negarles herramientas indispensables para el trabajo desde y con su propia voz y visión del mundo.
LA IMPORTANCIA DEL ESTUDIO DE LA DRAMATURGIA
Practicar un arte sin conocimiento puede llevar rápidamente al agotamiento o a callejones sin salida. Como maestro de escritura creativa, pero sobre todo como profesional del teatro, considero indispensable que los alumnos ejerciten la escritura y el estudio de la dramaturgia en cualquiera de sus variantes.
Como objeto de estudio la dramaturgia es un término complejo que implica una práctica que “une” lo separado, que “teje” con lo distinto. Es el arte de la disputa y de la presencia del yo, el arte de asumir las voces del otro, de los otros.
Como práctica artística puede ser verificado y analizado en sus distintos elementos: estilo, estructura, contenido, coherencia, etc.
El teatro no puede negar su relación con la palabra, el silencio y la estructura del relato, pero no se ciñe sólo a eso, es también escritura del yo y entendimiento del otro; es ficción atravesada por lo real o realidad ficcionalizada, es documento y relato, texto y subtexto; intención y postura estética, pero también política.
Si la dramaturgia es importante hoy en día es porque el campo profesional del teatro exige dramaturgias eficaces; los directores escénicos buscan textos, los colectivos crean sus dramaturgias, los actores escriben unipersonales.
Estudiar la dramaturgia o perfeccionarse en esa área es una necesidad profesional que permite a colectivos, compañías teatrales o individuos elaborar sus propias obras y no sólo buscar entre el repertorio existente. También permite entender mejor la dramaturgia contemporánea que está en circulación y elegir mejores textos entre la oferta disponible. Además existen concursos estatales, nacionales e internacionales; festivales y encuentros que premian y difunden la dramaturgia contemporánea.
El campo profesional del teatro requiere dramaturgias emergentes y provocadoras. No se trata, como quizá creen los críticos del logocentrismo, de ceñirse a modelos de hacer aristotélicos o de cualquier otro tipo, sino de entender que en la dramaturgia no existe un modelo.
El proceso de aprendizaje requiere de la inmersión en la práctica: dramaturgia textual, escénica, dramática o posdramática. La dramaturgia es una herramienta fundamental en la creación teatral,
necesaria para que las formas se renueven y para que el egresado de teatro pueda defenderse y ocupar un espacio en el campo profesional con sus propias creaciones.
CIERRE
Hasta ahora el discurso de un cambio profundo y radical hacia las artes vivas tiene a la escuela sumida en el oscurantismo administrativo y sin un rumbo claro.
Sería no sólo pertinente, sino sensato, que el coordinador le abra la puerta a otros directores escénicos para que se hagan cargo de las puestas en escena "emblemáticas" de la escuela. Hay maestros capaces de asumir una responsabilidad así, o podría invitar a directores residentes. No veo ninguna necesidad de permanecer en esa postura habiendo tantas necesidades materiales por atender en la escuela, y además seguir aplazando la transición hacia las artes vivas que él mismo propuso.
Por la salud de la comunidad estudiantil y por el trabajo de todos mis compañeros maestros a quienes también extrañaré harto, deseo que el rumbo se aclare pronto.
Nos merecemos una escuela con un rumbo claro y cuyos objetivos tengan en cuenta el beneficio hacia la sociedad, es decir, la formación de profesionales éticos y comprometidos con ella.
Vidal Medina
27 / 12 / 2025
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